La plata ha sido utilizada como medio de pago desde hace siglos, gracias a sus características y al hecho de que su valor era preciado universalmente. Desde los denarios con los que se pagaba a los legionarios romanos, a los reales de a ocho o ‘Spanish Dollars’, que se convirtieron en la primera divisa mundial, la plata ha desempeñado un papel fundamental en la Historia, por su valor intrínseco.

Hoy en día sigue siendo muy apreciada por los inversores. Aunque es el más barato de entre los metales preciosos, su doble condición de metal de inversión y materia prima industrial la convierte en un activo especialmente interesante como depósito de valor y elemento de diversificación de la cartera de inversión.

Los avances tecnológicos confieren cada vez mayor protagonismo a un metal ampliamente utilizado en sectores como el electrónico o el altamente estratégico de la energía solar fotovoltaica.

Un reciente informe publicado por la compañía canadiense de servicios financieros Sprott incluye un incluye un decálogo con los argumentos por los que resulta aconsejable invertir en plata. Vamos a repasarlos.

1.- Es uno de los medios de pago más antiguos

La plata se ha utilizado como medio de pago desde hace muchos siglos, para adquirir bienes y servicios. Tanto en forma de lingotes como, más adelante, en monedas, el metal ha sido uno de los más comunes en las transacciones comerciales de numerosas civilizaciones.

Su uso más antiguo como medio de pago se remonta a hace más de 5.000 años. El siclo fue una antigua unidad monetaria y de peso utilizada en Próximo Oriente y Mesopotamia, cuya primera referencia data del año 2.150 a. C., durante el imperio acadio.

El siclo de plata aparece mencionado en varias ocasiones en la Biblia, tanto en el Antiguo Testamento (los hermanos de José lo vendieron a una caravana de mercaderes por 20 siclos de plata) como en el Nuevo (se cree que las 30 monedas de plata que recibió Judas por traicionar a Jesús eran siclos de Tiro).

Como moneda, la plata ha estado presente en numerosas civilizaciones: Grecia, Roma, el Imperio Española, China, el nacimiento de los Estados Unidos… Y aún siguen acuñando anualmente millones de monedas de este metal.

2.- Es un punto de entrada ideal para la inversión en metales preciosos

La plata tiene un precio considerablemente menor que el del resto de los metales preciosos, como el oro, el platino o el paladio (ver tabla adjunta, elaborada por Sprott).

 

Por ello, es el metal ideal para que quienes no han invertido nunca en metales preciosos se inicien en ello.

Conocida como “el dinero del pueblo”, su precio en onzas es considerablemente menor, aunque comparte con el resto de metales preciosos las cualidades que la hacen deseable.

Además, su menor precio relativo la convierte en un medio de pago ideal y en un recurso de inversión muy flexible, ya que permite una liquidación parcial, en cantidades modestas, algo que no es posible con metales como el oro.

3.- Es el metal precioso más demandado por la industria

La plata es la segunda commodity más usada del mundo, solo por detrás del petróleo, y cuenta con más de 10.000 usos, debido a sus características físicas, como su reflectividad, su capacidad de conducir el calor y la electricidad, su resistencia a la corrosión, sus propiedades antibacterianas y su ductilidad y maleabilidad.

No es extraño que, como se aprecia en el gráfico inferior, el sector industrial acapare más del 50% de la demanda global anual de plata, superando a los sectores joyero y de inversión combinados.

Su amplia variedad de usos hace que sea muy difícil sustituirla en numerosas aplicaciones industriales, desde interruptores eléctricos a paneles solares fotovoltaicos o catalizadores químicos.

4.- Es un elemento clave en las innovaciones tecnológicas relacionadas con el medio ambiente

Según un estudio de BMO Capital Markets, el continuo crecimiento de la demanda de electricidad y el fomento de las energías renovables apunta a un aumento de la potencia solar instalada en el futuro cercano, lo que permitirá aumentar la demanda de plata en un 85% (185 millones de onzas, 5.754 Tm) en 10 años.

A día de hoy, el metal resulta fundamental en sectores clave como los vehículos eléctricos (entre 25 y 50 gramos cada uno, 125 millones de unidades previstas para 2030); los paneles solares (20 gramos cada uno, la potencia instalada se multiplicará por cuatro en 2030); los teléfonos móviles (0,34 gramos cada uno, 5.000 millones de unidades para 2030); además de otros usos en la industria médica.

5.- La demanda crece impulsada por las energías renovables

La demanda de plata por parte del sector fotovoltaico ha crecido a un ritmo anual del 8% desde 2012, pasando de representar el 5,6% del total al 11,3% en la actualidad (ver gráfico).

No solo eso: la práctica totalidad de las tecnologías destinadas al fomento de las energías renovables cuentan con la plata como una de sus materias primas fundamentales.

6.- Es un activo físico que no se puede ‘hackear’ o eliminar, ni pierde su valor

La plata ha sido un depósito de valor y un medio de pago fundamental durante milenios debido a su suministro constante, su adopción universal y su condición de activo refugio.

Aunque las divisas fiat como el dólar estadounidense son ampliamente utilizadas y ofrecen una cierta estabilidad de precios, carecen de un suministro constante y pueden ser impresas a voluntad por los gobiernos. Este incremento monetario implica que, a largo plazo, estas divisas van a perder su poder adquisitivo en relación con la inflación.

Por su parte, las criptomonedas como el bitcoin han adquirido una gran popularidad en los últimos años, debido a una meteórica subida de su precio. Sin embargo, aunque el bitcoin cuenta con un suministro fijo y puede utilizarse como alternativa a las divisas tradicionales, al igual que la plata, la volatilidad del precio del bitcoin es demasiado alta como para poder considerarlo como un depósito de valor en el que se pueda confiar.

Como vemos en el gráfico superior, la cantidad de plata extraída a lo largo de la historia asciende a más de 1,5 millones de toneladas, que serían equivalentes a un cubo de 52 metros de lado.

En comparación, los otros metales preciosos son mucho menos abundantes: 154.000 toneladas de oro, 8.000 de paladio y 8.000 de platino.

7.- Tiene una baja correlación con el resto de activos de inversión

La mayor parte de los principales activos de inversión mantienen una alta correlación entre sí, lo que significa que tienden a moverse en la misma dirección al mismo tiempo.

Esto se debe a que la mayoría de activos, como las acciones, inmuebles o commodities tienden a subir y bajar en función de la situación de la economía y el sentimiento de los inversores.

En cambio, el precio de la plata se ve influido por factores diferentes a los de la mayoría de activos de inversión, como la demanda industrial, lo que provoca que exista una muy baja correlación con ellos. Esto quiere decir que el precio de la plata se mueve independientemente de lo que suceda con acciones, bonos y demás, por lo que puede ejercer un importante papel de elemento diversificador de una cartera de inversión en la que estén presentes también los otros activos.

8.- Es muy barata en comparación con el oro

Debido a que oro y plata comparten muchas de las cualidades como activos de inversión, los inversores han tendido a contar con ambos o usarlos de forma intercambiable.

Una de las métricas que utilizan los economistas para determinar si la plata está infravalorada o sobrevalorada es la ratio oro/plata, que mide el número de onzas de plata que se necesitan para adquirir una de oro.

En estos momentos, la ratio está en 75,8, lo que significa que el oro está cotizando muy por encima de la media a largo plazo, que es de 50. Por tanto, la plata está infravalorada con respecto al oro, lo que significa que tiene mucho potencial de subida, que hay que aprovechar.

9.- Atrae a una nueva categoría de inversores

La percepción habitual es que los inversores en metales preciosos tienden a ser conservadores y buscan preservar su patrimonio acumulado y protegerlo frente a los riesgos del mercado.

Aunque la plata también atrae a este tipo de inversores, en los últimos tiempos se ha caracterizado por interesar a una nueva y muy diferente categoría. Prueba de ello fue la actuación de numerosos inversores, coordinados por la plataforma Reddit que, en marzo de 2020, actuaron de forma coordinada para elevar el precio de la plata.

El resultado fue que, en unos meses, el metal pasó de 11,98 a 29,13 dólares la onza, lo que representa una subida del 143,16%.

Lo cierto es que, aunque el precio de la plata es más volátil que el del oro, debido al menor tamaño de su mercado, la media de la revalorización de los 10 mejores años de la plata prácticamente duplica a la del oro y casi triplica a la de las acciones, como se puede apreciar en el gráfico anterior.

10.- Puede ser un excelente complemento para el oro

Los metales preciosos suelen tener una buena revalorización en momentos de devaluación de las divisas fiat, exceso de impresión de papel moneda y subida de la inflación.

Dado que oro y plata comparten las mismas cualidades de inversión, quienes confían en ellos suelen utilizarlos de forma indistinta, incluso combinarlos para maximizar los rendimientos de la cartera.

En momentos de subida del precio de los metales preciosos, la revalorización de la plata ha sido 2,1 veces superior a la del oro.